sábado, febrero 25, 2012

Un cable suelto pone en duda el experimento que cuestionó a Albert Einstein


Al final, parece que Einstein tenía razón. Los neutrinos probablemente no sean más rápidos que la luz, después de todo. Los datos registrados por el experimento Opera el pasado mes de septiembre y que pusieron en duda la Teoría de la Relatividad, aparentemente se debieron a una anomalía en el funcionamiento del aparato de medición.
Según informa la web de la revista 'Science', el resultado que dio que los neutrinos eran 60 nanosegundos más rápidos que la luz se debió a una "mala conexión" entre un cable de fibra óptica que va conectado a un ordenador con receptor GPS utilizado para medir el tiempo de los neutrinos.
El propio Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) ha reconocido en un comunicado que se han identificado dos posibles fallos que ponen en tela de juicio los resultados del famoso y polémico experimento.

El primer posible error pudo deberse a una conexión defectuosa en el cable de fibra óptica que conecta el reloj central del experimento con el GPS exterior. La segunda anomalía pudo ser un fallo en la frecuencia del oscilador del cronómetro interno del experimento.
El CERN explica que estos dos fallos podrían haber producido efectos opuestos. Es decir, mientras el ajuste del cable podría suponer un aumento en la velocidad de los neutrinos, la corrección de la frecuencia podría disminuirla.
Antes de conocerse esta eventual equivocación, estaba previsto repetir los experimentos el próximo mes de mayo. Sin embargo, el portavoz del CERN James Gilles considera que esta agenda probablemente se verá alterada y los experimentos se reanudarán una vez subsanados los errores.
Gilles reconoce que los sorprendentes resultados del laboratorio ahora están en duda. "Se ha encontrado una posible explicación. Pero no lo sabremos con seguridad hasta que hayamos hecho las pruebas con un nuevo experimento", dijo Gilles.

Físicos que participaron en el experimento dijeron que cuando informaron de sus resultados revisaron en múltiples ocasiones durante varios meses cualquier cosa que pudiera haber producido una lectura errónea antes de anunciar sus hallazgos.
Una segunda prueba, cuyos resultados fueron anunciados en noviembre, pareció confirmar que los neutrinos viajaban más rápido que la luz. Pero muchos expertos se mantenían escépticos frente a un resultado que habría anulado uno de los principios fundamentales de la física moderna.
Edward Blucher, presidente del Departamento de Física de la Universidad de Chicago, dijo que el hallazgo original habría sido impresionante si hubiese sido cierto. En su momento, la investigación provocó mucha controversia en la comunidad científica, pero muy pocos físicos defendían la validez de los resultados, y la mayoría estaba convencida de que tenían que deberse a un error.
"No creo que haya conocido a nadie que dijera que apostaba a que era cierto. Creo que la gente del experimento trabajó de forma tan cuidadosa como pudo y creo que se les acabaron las ideas sobre qué pudo haber salido mal y decidieron presentarlo", declaró.